Sacramental y Penitencial Hermandad de la Sagrada Cena y Ntra. Sra. del Patrocinio
Fundación: 2003.
Número de Hermanos: 315.
Imágenes:
- Jesús del Amor, Sagrada Cena.
- Ntra. Sra. del Patrocinio.
Todas las imágenes son del escultor sevillano Juan Antonio Blanco Ramos.
Hábito:
Túnica y cubre rostro de color blanco marfil con botonadura y vivos de color vino burdeos. Capa de color vino burdeos con el escudo de la Hermandad a la altura del antebrazo izquierdo. Fajín de 25 cm. de ancho. Sandalia de color cuero y en caso de usar calcetín este será de blanco marfil obligatoriamente.
El cubrerrostro, llevará, así mismo el la parte delantera el escudo de la Hermandad y Cofradía de la Sagrada Cena y Ntra. Sra. Del Patrocinio.
Junta de Gobierno:
- Hermano Mayor: D. Rafael Angulo Sanchís.
- Vice-Hermano Mayor: D. Julio Flores Hernández.
- Secretario: D. Gaspar Fernández Morillo.
Reseña Histórica:
Corría el otoño del año 1999 cuando uno de los “incombustibles” de la Semana Santa, Pablo Burgos[1], reunía a un grupo de entusiastas cofrades para plantearles un titánico proyecto que pretendía llevar a cabo en la Parroquia de San José. Unas reuniones que se realizaban, semanalmente, en sus oficinas de la calle Mariano José de Larra y en la que se fue fraguando un proyecto que, a todas luces, parecía imposible de llevar a cabo por su magnitud y, fundamentalmente, por el costo económico del Misterio procesional planteado.
Expuesto el proyecto a la Junta de Cofradías, y con el beneplácito del párroco de San José, por entonces D. Heliodoro Almeida, comenzó a gestarse la Hermandad para ofrecer a la Semana Santa de Mérida uno de los Misterios anhelados y que, todavía, nadie había sacado adelante.
Se contactó con el imaginero sevillano Juan Antonio Blanco Ramos, al que se llegó tras haber visto expuesto -en uno de los escaparates de la sevillana Plaza del Salvador- el busto de una dolorosa y el teléfono de este imaginero que, como muchos, utilizan ese tipo de “exposiciones en la calle” para captar la atención de los miles de cofrades de toda España que pasean por las calles de la ciudad hispalense.
Así, Blanco Ramos presentó un boceto, a grafito, de una Sagrada Cena que impresionó a los participantes en aquellas primeras reuniones. Con ese esbozo en papel, con esas pinceladas de lo que podría ser para Mérida la ejecución de un ambicioso paso como el de la Sagrada Cena, la Hermandad comenzaba a cobrar forma y el proyecto echaba a andar con el escepticismo de quienes pensaban que no se culminaría, y que todo quedaría en eso, en un propósito inacabado.
Pero el tesón de Burgos y el de todas las personas que se fueron sumando a su proyecto comenzaron a dar sus frutos, y así, en la Semana Santa de 2004 salía a la calle la primera Estación de Penitencia de la Hermandad con los dos pasos, en el primero Nuestro Padre Jesús del Amor, que procesionaba en el paso de la Flagelación de la Hermandad del Calvario y la Virgen, Nuestra Señora del Patrocinio.
Hay que destacar que éste paso, el de la Virgen, se convirtió en el primer paso de la Semana Santa de Mérida portado, únicamente, por costaleras. Un hecho que, sin duda, abría las puertas para las cuadrillas de mujeres en Mérida que, hasta el momento, y desde 1993, participaban en algunos pasos de forma mixta, con hombres.
Al año siguiente la Cofradía plantó en la calle el paso del Cristo con una canasta realizada en su totalidad con claveles blancos y rojos que sorprendió al numeroso público que salió a su encuentro en su recorrido procesional. Muchos pensaron, por aquel entonces, que sería una seña más de identidad de la Hermandad, al igual que ya lo es el que, en la delantera del paso de Misterio, se coloque un palmito.
Lo que sí se convirtió en toda una seña de identidad fue el fuerte emeritensismo de los pasos. Así, toda la vajilla del paso de la cena, así como la jarra y la jofaina, son obra del prestigioso ceramista Juan Manuel Pérez Vinagre. Igualmente, los respiraderos de los pasos fueron ejecutados en carpinterías de la ciudad.
La Cofradía no llegaba a tocar la Carrera Oficial sino que, por Juan Dávalos Altamirano, bajaba Romero Leal y regresaba por John Lennon a su barriada. Así procesionó hasta la Semana Santa del año 2006, a finales de ese año, el Arzobispado erigió canónicamente a la cofradía y ésta pudo completar su recorrido hasta la Carrera Oficial con la autorización de la Junta de Cofradías.
El trabajo de la Hermandad fue constante y así, cada año, añadían imágenes al Misterio de la Sagrada Cena que pudo procesionar completo en el año 2011, con la incorporación de la imagen de Judas en el paso.
El orden en el que de las imágenes se fueron añadiendo al Misterio y, por ende, a la Semana Santa es el siguiente:
2005.- San Juan Evangelista.
2006.- San Pedro y San Judas Tadeo.
2007.- Santo Tomás y San Mateo.
2008.- Santiago “El menor” y San Andrés.
2009.- 2010 San Felipe, Santiago “El Mayor” y San Bartolomé.
2011.- San Simón y Judas.
Hay que destacar que, lejos de la leyenda urbana que decía que los rostros de los apóstoles reflejaban a distintos personajes emeritenses que, “supuestamente”, habían “sufragado” las mismas, los rostros representan personas conocidas por el propio imaginero o que le han servido de inspiración, dándose la circunstancia de que la imagen de Judas es un autorretrato del artista y en el apostolado, algunos familiares.
La Cofradía de la Cena ha sabido aprovechar su ubicación para buscar, en su recorrido del Domingo de Ramos, enclaves importantes de la ciudad que dan un mayor lucimiento a su Estación de Penitencia.
De esta manera, han convertido ya en un momento clave del Domingo de Ramos, la bajada de sus pasos por la empinadísima calle José Ramón Mélida hasta la Puerta de la Villa. Igualmente, el discurrir de la Cofradía por el Templo de Diana es otro de los momentos “clave” de la jornada.
Extracto del libro “La vida en una semana” ®
[1] Pablo Burgos Guillén fue Hermano Mayor de la Cofradía Infantil, miembro fundador de la Junta de Cofradías y fundador de la Cofradía de la Cena.