Una espada te traspasará el alma
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“Jesús es arropado en su camino al Calvario por cientos de emeritenses que, como Simón de Cirene, sostienen el aliento cuando aquél que ha venido a dar su vida por nosotros.“ |
El sol aun asoma aun por el horizonte de los campos cercanos a Mérida cuando al otro lado del otrora río Anas, el azul del cielo despejado comienza a confundirse con los capirotes de los hermanos cofrades del popular “Polígono Nueva Ciudad”.
Por una noche, Jesús es arropado en su camino al Calvario por cientos de emeritenses que, como Simón de Cirene, sostienen el aliento cuando aquél que ha venido a dar su vida por nosotros, cae rostro en tierra por el peso de una cruz cargada con los pecados del mundo materialista y egocéntrico del hombre del siglo XXI.
Miércoles Santo 2018. Cofradía de las Tres Caídas
Fotografía: Paco Rosco Rosco
Primera Caída
La Cofradía del Stmo. Cristo de las Tres Caídas y Ntra. Sra. De la Misericordia abandona su barrio camino del centro de la ciudad por el Puente Romano que da vida con cada uno de sus arcos a esta Mérida bimilenaria, cristiana hasta el tuétano.
Cada uno de los pasos que los portadores dan sobre los adoquines, son saboreados intensamente por el público que abarrota y acompaña a la imagen más humilde y humana del Maestro, y anticipa la venida tras de sí de su Madre que, con un corazón puro, rebosa dolor y esperanza e intercede ante su Hijo y el Padre por el perdón del mundo que condena a la Cruz a un inocente.
Miércoles Santo 2018. Cofradía de las Tres Caídas
Fotografía: José Luis Garrido
Segunda Caída
Miles de personas esperan en la puerta de la Concatedral de Mérida la llegada de la Estación de Penitencia, y la Cruz de Guía asoma desde la cuesta de la calle El Puente para introducirse en la Plaza de España y encarar la puerta de la Sede Metropolitana.
Es ahora más que nunca cuando Mérida se convierte en Cirineo de un Jesús apaleado y humillado que, sin embargo, muestra la plenitud de su majestad de la mano del maestro sevillano Francisco Berlanga de Ávila.
Y tras de él, la Virgen de la Misericordia domina el cielo estrellado en el que ya no le acompaña más luz que la de la imponente luna que compite sin
Miércoles Santo 2018. Cofradía de las Tres Caídas
Fotografía: Luis Zama Álvarez
Tercera Caída
Pasa la media noche cuando la Cofradía vuelve a su Parroquia, y antes de que el Nazareno continúe su camino al Calvario, un último momento para que su Madre sienta cerca el latir del corazón de Aquél por el que dijo “Hágase en mí según tu Palabra”.
“Una espada te traspasará el alma” le dijeron, cuando aún no era capaz de comprender el dolor en su corazón, pero antes de la despedida todo su barrio la acompaña en una noche fría de Miércoles Santo, y así se funden por un momento en un abrazo de amor fraterno con la Madre de la Misericordia y con su Hijo, roto por el peso de la cruz.
Se van por el camino hacia el Calvario, y con ellos se van de nuevo el trabajo y la ilusión de todo un año que esta Cofradía renueva desde ese mismo momento para, con la primera luna de la siguiente Primavera, volver a llevar el mensaje de Amor y Misericordia sobre sus hombros.
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